Un almacén limpio es más que uno libre de polvo, suciedad, mugre y otros desechos. El esfuerzo que invierte en la limpieza puede pagar grandes dividendos en una amplia gama de áreas. De hecho, un programa de limpieza bien regulado no solo puede mejorar la productividad y la colaboración de sus empleados, sino que también puede tener un impacto positivo importante (e inmediato) en toda su cadena de suministro.

El efecto dominó de la limpieza

Cuando un almacén está limpio y organizado, los empleados pueden moverse y utilizar el espacio de manera más eficiente. Esto les facilita mucho hacer su trabajo, lo que significa una mayor productividad en todos los ámbitos. Si es más fácil para alguien localizar y navegar a los artículos necesarios para los pedidos, podrá obtener un mayor volumen de pedidos en la puerta y en camino a los clientes más rápidamente, lo que tiene un impacto directo en sus oportunidades de ingresos.

Ese concepto también facilita que sus trabajadores se relacionen con su empresa. Tenga en cuenta que según The McKinsey Global Institute, la productividad tiende a mejorar entre un 20 y un 25% en organizaciones con empleados altamente comprometidos y conectados.

Dar prioridad a un almacén limpio también ayuda a aliviar ciertos problemas comunes que los supervisores y el personal pueden enfrentar. Almacenar las cosas de una manera muy lógica y directa le da a todos los involucrados un nuevo nivel de visibilidad de dónde está todo y qué está sucediendo. Incluso puede ver menos pedidos atrasados (u pedidos que se han perdido por completo), ambos escenarios que le costarían dinero.

Esa visibilidad continuará demostrando ser valiosa a largo plazo también. Si tiene un mejor control sobre la composición física de su inventario, la implementación de mejoras adicionales como un sistema de gestión de almacén es mucho más fácil. También será más fácil gestionar la responsabilidad en su cadena de suministro. Los entornos caóticos pueden provocar errores, por lo que mantener un espacio ordenado puede tener un impacto positivo en la precisión. En un centro de despacho ocupado, por ejemplo, el costo de enviar un pedido a un cliente por segunda vez suele ser más del doble que el primero, lo que ilustra aún más cómo algo tan aparentemente simple como la limpieza puede tener implicaciones masivas en todos los ámbitos.

Consideraciones adicionales

Pero para actuar de acuerdo con esta información, debe asegurarse de haber seleccionado el equipo de limpieza adecuado. Hay una serie de factores esenciales que debe considerar para ese fin.

Quizás la más inmediata de esas consideraciones tiene que ver con el tipo de piso con el que está trabajando. Siempre debe asegurarse de sellar las superficies recubiertas para ayudar a prevenir las manchas de líquidos derramados y para mantener bajo control las partículas de suciedad que puedan estar presentes en el medio ambiente. Del mismo modo, los pies cuadrados afectarán directamente el tipo de equipo que debe comprar para limpiar su almacén. Por lo general, se necesitan máquinas más grandes para espacios abiertos y expansivos en aras de la eficiencia, mientras que los pasillos y espacios más pequeños requerirán activos que sean mucho más compactos.

Al final, las mejoras de eficiencia por sí solas suelen ser suficientes para que la limpieza reglamentada valga la pena para la mayoría de los profesionales de gestión de almacenes. Pero cuando también considera el hecho de que está creando una instalación más segura para sus empleados, y que puede reducir errores y problemas logísticos, es fácil ver por qué este es el paso correcto en su almacén.